domingo, 16 de agosto de 2009

Días como este.

Hay ciertos días en que desconozco mi historia y entonces el presente momento pierde todo lazo de unión y sentido al pasado ocurrido.
Deambulo por las calles y el mundo es azul, las nubes ineludibles y el sonido lento en demasía. Recorro pasajes urbanos y también humedades, muchas piernas se mueven con lógica prisa; no puedo ver rostros pero sí imaginar historias de jornadas laborales pesadas y camisas que deberán lavarse antes de tiempo por el espontáneo aguacero.
De pronto me apetece fumar pero no sé si fumo ni mucho menos cuál es la marca que fumo, poco me importa y entro a una tienda compacta a más no poder, levanto la mirada y un hombre, también compacto, me atiende con desinterés. Pido tabaco y pago, encuentro licor entre las decenas de productos amontonados y lo pido también, no sé si tomo, hoy lo haré.
Vuelvo a casa impaciente y sediento, alrededor las personas eluden gotas celestes en danza simpática, un hombre de traje salta los charcos con gracia y su acompañante femenina tiene mal gesto, ese gesto de enojo que sólo las esposas logran. Me aburro del mundo y encuentro el lugar donde vivo, abro la puerta y después la botella, un trago, dos tragos, enciendo el cigarrillo que la lluvia me impidió fumar hace minutos, tres tragos, reposo en mi cama.
Tocan la puerta y salgo al encuentro de… ella, sonríe como puede y hago lo mismo, no sé quién es, la invito a pasar.
Observa mi habitación, repara en la botella y sus labios se contraen formando una O, pregunta qué pasa, respondo sincero que ignoro tal cosa. Se sienta en un sofá sin hablar más.

-Estás lloviendo.
-¿Eh? Sí… ya tiene unas horas.
Responde con voz desvanecida.
-No, tú estás lloviendo ¿por qué?
No responde y permitimos al silencio pasearse por mi habitación un par de minutos hasta que no puedo más e interrogo.
-¿Te amo?
Me mira sorprendida un instante y después inclina su cabeza para contestar.
-No en días como este.

5 comentarios:

  1. destinado a convertirse en un clásico klingbergiano.

    saludos afectuables.

    ResponderEliminar
  2. " No en días como éste". Sin duda excelente final.
    Como dije: ahora sí sería pecado poner "motocicletas" hahaha.
    Mi entrada favorita hasta ahora.

    ResponderEliminar
  3. EXCELENTE entrada man... MAGNIFICA!
    Un abrazo amigo!

    ResponderEliminar
  4. Que desolación...me gustó...

    ResponderEliminar
  5. Me pareció muy profundo el breve momento en que hablan los amantes de la historia

    ResponderEliminar